¿Ha intentado fijarse objetivos de bienestar personal que acaban siendo demasiado difíciles de alcanzar? No estás solo, y parece que muchos de nosotros cometemos los mismos errores.
Estos errores comunes a la hora de establecer objetivos no sólo son frustrantes y consumen mucho tiempo, sino que también pueden suponer una completa pérdida de dinero (¡hola costosa limpieza de zumos!). Pero los días en los que no hay que fijarse objetivos han llegado oficialmente a su fin... ¡gracias a nuestros profesionales de TaskHuman!
Algunos de nuestros mejores entrenadores de TaskHuman comparten los tres errores más comunes a la hora de establecer objetivos y, lo que es más importante, sus secretos para aplastar los objetivos de bienestar de una vez por todas. Sigue leyendo para descubrirlos.
Error #1: Ir demasiado GRANDE
Sí, ya sabemos lo que dicen... "Go big or go home".
Tal vez no tan rápido...
Piense en un momento en el que se levantó y decidió fijarse un nuevo objetivo. Imagina que quieres empezar a correr, así que decides participar en una carrera. En el pasado, tu plan podría haber sido algo así:
Día 0 = No soy un corredor.
Día 1 = Entrenar para un maratón.
Parece un poco extremo una vez que lo pones así, ¿eh?
Naturalmente, la idea de lograr algo pone a nuestro cerebro a toda máquina y pensamos en lo más grande y lo mejor que nos permitirá realizar la tarea de inmediato (como entrenar para una maratón).
Por desgracia, si optamos por adelantarnos diez millas (o un maratón), corremos el riesgo de volver al punto de partida o de abandonar antes de empezar.
¿La mejor manera de evitar este error?
Evalúa el objetivo y divídelo en trozos del tamaño de un bocado. Cumple el primero y pasa al siguiente.
Antes de que te des cuenta, estarás tachando objetivos de tu lista más rápido de lo que puedes decir... "¡CORRE!".
Entrenador Hally Paulson tiene algunos consejos estupendos sobre este mismo concepto.
Lectura relacionada: La clave para alcanzar sus objetivos: crear una visión inspiradora
Error #2: Mantener tu objetivo en secreto
En lugar de dejarte llevar por las dudas y guardarte tus sueños y planes para ti, compártelos.
¿Hay objetivos que quieres alcanzar? ¿Estás dispuesto a dejar de hacer algo que te está frenando? ¿O crees que puedes empezar a poner en práctica algo que hará tu vida más plena?
Comparte esta información con un amigo, un entrenador o incluso tu diario. Pero no mantengas tus objetivos en secreto.
Cuando compartes tus objetivos, te oyes a ti mismo decir lo que quieres en voz alta. Y puede que la gente que te rodea ponga de su parte para ayudarte a conseguirlo.
BONO¡! Cuando compartas tus objetivos, incluso puedes pedirle a alguien que te haga responsable. Que alguien te haga un seguimiento y te siga preguntando cómo te va puede marcar la diferencia.
Esto es lo que el entrenador Sedae Slaughter sobre la idea de la responsabilidad.
Error #3: Fijar un objetivo y olvidarlo
La mayoría de la gente ni siquiera se da cuenta de que está cometiendo este error hasta que se despierta un día y se da cuenta de que no ha pasado nada desde el primer día.
Puede evitarlo simplemente haciendo un poco de planificación.
Por ejemplo, si te fijas el vago objetivo de "leer más libros este año". Podría ser fácil seguir tu alegre camino, sin mirar atrás, hasta que te das cuenta de que has leído exactamente cero libros.
¿La mejor forma de evitarlo? Elabore un plan y fíjese metas periódicas, como leer un libro cada ocho semanas e ir tachándolo de la lista a medida que avanza. Tener un plan fijo y unos miniobjetivos claros para ir avanzando te ayudará a mantenerte en el buen camino y a no perder de vista el objetivo.
Entrenador Hannah Rosenbaum tiene una gran visión de esto mismo.
Finalmente...
Ahora que conoce los tres principales errores a la hora de fijar objetivos y sabe cómo evitarlos, está muy por delante de la mayoría de la gente.
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