learning new tools and programs made easier by TaskHuman

La automatización afecta a los puestos de trabajo como parte de la actividad empresarial. Más aún después de la pandemia, cuando con la escasez de mano de obra. La actual incertidumbre del mercado impulsa a las empresas a idear nuevas formas de seguir el ritmo de las necesidades de los compradores. También buscan formas de reducir costes y ofrecer un producto solicitado. Las nuevas tecnologías y los nuevos procesos mantienen la competitividad de las empresas en un clima empresarial difícil. Las nuevas innovaciones pueden hacer de su lugar de trabajo un sitio emocionante y lleno de energía. Aun así, aprender cosas nuevas puede causar cierto estrés a los trabajadores que tienen que hacer su trabajo en un tiempo limitado. Pero el cambio es la única constante en los negocios, así que vale la pena mantenerse flexible y abierto a nuevas formas de hacer las cosas. A continuación le ofrecemos algunos consejos que le ayudarán a aceptar el cambio y a adaptarse más rápidamente a las nuevas herramientas y procesos que implante su empresa. 

#1. Utilice un calendario reflexivo

Trabaja con tu jefe para desarrollar un plan de formación que incluya tiempo en el trabajo para aprender. Asegúrate de que tu jefe tenga en cuenta tu aprendizaje en el trabajo a la hora de fijar tus objetivos de rendimiento y resultados. Obtén de tu jefe un calendario claro para llevarlo a cabo. Cuando sepas lo que tu jefe espera de ti y cuándo, podrás marcarte un ritmo de aprendizaje y establecer hitos personales para tu progreso. Divide tu aprendizaje en segmentos más pequeños para que sea menos desalentador. Esos pequeños pasos se suman rápidamente con diligencia. Le sorprenderá lo rápido que domina la nueva metodología.

#2. Superar las dificultades de aprendizaje

Si le cuesta entender y ejecutar la nueva herramienta o proceso, puede tomar las riendas de la situación y corregir el rumbo de varias maneras. 

  • Práctica en la intimidad.
    Puede ser útil practicar solo, sin público. Tu casa puede ofrecerte un entorno más relajado para que repases la nueva herramienta o proceso a tu ritmo, tantas veces como sea necesario.
  • Consigue la ayuda de otros.
    Practica con un entrenador o un miembro del personal superior. A veces, la perspectiva de otra persona puede ayudar a consolidar la información recién aprendida. Puedes beneficiarte de las experiencias de otra persona tanto en implementaciones exitosas como fallidas. Un coach empresarial puede mostrarte una forma de aprender mejor que la que estás utilizando. Puede ser una táctica que no se le habría ocurrido a usted solo. El aprendizaje suele ser una tarea de grupo, así que no te aísles cuando te topes con un muro. Ese es el momento más importante para pedir ayuda. 

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#3. Superar los complejos

  • Encuentra valor.
    Es difícil aprender algo si no le ves el valor. Lo ideal es que tu jefe te haya explicado las razones del cambio. Pero si te cuesta creer en la nueva solución, no pasa nada por hacer preguntas para que te quede claro. Es posible que tu jefe haya omitido algunos detalles clave que podrían suponer una gran diferencia para ti. Prepara unas cuantas preguntas bien pensadas y prepáralas de forma positiva para que entiendas perfectamente cómo el nuevo cambio puede ayudarte a rendir mejor en tu puesto. También puedes buscar ejemplos de otras empresas que hayan adoptado la misma solución y tomar nota de sus resultados, concretamente en tu departamento. Conocer mejor el potencial de la solución puede ayudarle a comprometerse mentalmente con el esfuerzo de aprendizaje necesario para convertir el potencial en su nueva realidad. 
  • Encontrar la confianza en uno mismo.
    Puede resultar desalentador tener problemas para recordar información nueva y recordarla con rapidez. Pero si te dejas llevar por el desánimo, tu cerebro buscará una salida en lugar de avanzar. Vuelve a estar "bien" reflexionando y hablando de ti mismo en positivo. Recuerda todo lo que has aprendido a lo largo de los años. Piensa en otras luchas a las que te has enfrentado y que has superado. Piensa en lo mejor que eres hoy porque te retaron a pensar y a crecer. Muchas de las habilidades que ahora utilizas con facilidad tardaste tiempo en aprenderlas. Ahora sigues siendo igual de capaz.
  • Mantén una actitud positiva.  
    Las personas que muestran una actitud positiva con sus compañeros y directivos consiguen más cosas. Investigación ha demostrado que las personas felices son 31% más productivos. Se centran en lo que pueden hacer para encontrar soluciones en lugar de lamentarse por los problemas. Para asegurarte de que tu perspectiva sigue siendo positiva, procura estar con los compañeros positivos de tu equipo. Estas personas pueden alimentar tu energía y apoyarte cuando tengas que aprender e implantar un cambio difícil. Dedica tiempo a animar a los que te rodean. Pensar en los demás deja menos tiempo para la preocupación y la frustración. Además, tus compañeros lo apreciarán y eso sienta bien. 


Practicar la gratitud, quizá como parte de tu rutina matutina, prepara el terreno para un día más optimista. Dedica tiempo a pensar en todas las bendiciones que has recibido últimamente y en el pasado. Piensa en las cosas que te están saliendo bien y en las personas que te importan. Incluso puedes practicar la gratitud en torno a la nueva solución que estás aprendiendo. Imagina las formas en que tus nuevos conocimientos o capacidades ayudarán a los demás. Quizá puedas atender a más clientes o atenderlos mejor. Puede que consigas más tiempo de tu día para hacer otras cosas. Imagina todas las direcciones positivas a las que puede llevarte la nueva solución. 

Aunque te guste la nueva solución, aprenderla y ponerla en práctica provoca cierto estrés. Asegúrate de dormir lo suficiente y de tener tiempo para relajarte. Cuida tus relaciones y tu vida fuera del trabajo. Las adaptaciones del puesto de trabajo exigen mucho de ti. Recárgate de energía para seguir avanzando hacia el objetivo final.